Lectura visual

Concepto

La lectura visual es el proceso de identificación e interpretación de los diferentes textos vinculados a las imágenes. Esto se llama lectura hiperlogográfica, en oposición a hipologográfica, que identifica los signos solo por su valor fonético.

El interés por la lectura visual se inició a principios de la década de 1900, en relación con el estudio sobre la percepción, un interés que trajo consigo una teoría compleja de decodificación de las formas simples (Gestalt). En este caso, la lectura es entendida como una gramática visual de la percepción, lo que permite establecer reglas fijas para la lectura, relacionadas con los hábitos cognitivos del lector.

Para dar una visión general de los estudios que se han ocupado de la lectura de imágenes, podemos identificar al menos tres áreas: la lingüística, la semiótica y el estudio del arte.

Análisis

Algunas orientaciones de la lingüística (Havelock, 1976; Cardona, 1981; Harris, 1993) identifican la presencia de imágenes ya en los signos lingüísticos y sostienen que la actividad de la lectura siempre ha tenido que ver con los sistemas mixtos. Desde los albores de la escritura, de hecho, los signos mostraron su doble naturaleza de figuración (los pictogramas, por ejemplo) y de abstracción (el arte).

El carácter simbólico y arbitrario presente en los primeros sistemas gráficos hasta ahora ha mantenido una presencia significativa en la escritura. Pensemos en los regis- tros actuales en la publicidad o en los textos electrónicos, donde las letras se valoran en forma de iconos. La decodificación por el lector, por lo tanto, implica un doble esfuerzo: el reconocimiento tanto de lo visual como de las formas abstractas.

Una importante teoría semiótica (Greimas, 1984) destinada a los textos visuales, especialmente las imágenes fijas, distingue dos niveles de interpretación. La primera lectura, de nivel plástico, solo tiene en cuenta los aspectos expresivos de las imágenes: formas, colores, líneas, planos, bordes, marcos, independientemente de las figuras representadas en ellas. La segunda, la lectura figurativa, implica el proceso de reconocimiento de las imágenes y de los significados culturales: en una pintura, por ejemplo, podemos identificar una casa y leerla como un lugar de cariño, como protección o captar la expresión de una tendencia arquitectónica determinada.

Una parte importante del estudio del arte (Warburg, 1966; Panofsky, 1939; Gombrich, 1950) entiende la lectura visual como un proceso interpretativo en el que la mediación cultural es esencial. El significado de cada imagen viene dado por la relación con el más amplio repertorio visual, construido sobre una base histórica. Leer las imágenes significa ponerlas en relación con el contexto cultural de pertenencia y, por lo tanto, con el sistema de texto que en ese contexto crea el mundo de los significados. Por ejemplo, el significado simbólico de las imágenes clásicas viene dado por el conocimiento de la literatura clásica, o el valor simbólico de la pintura cristiana puede ser reconstruido a través del conocimiento y la exégesis de los textos sagrados. En la lectura de las obras de arte, por lo tanto, el estímulo perceptivo debe ser atribuido a la competencia cultural del sistema a la que la misma obra de arte pertenece: el autor, el estilo de la pintura, el período histórico. La lectura es equivalente a la reconstrucción de la red que vincula las pinturas individuales a otros textos de la misma época o de una pasada, a través de procesos de referencia intertextual o de imitación de los modelos.

 

Implicaciones

En cada una de estas definiciones, el proceso de la lectura visual es a menudo puesto en relación con la lectura del lenguaje verbal. En estudios más recientes, que tienen en cuenta los textos electrónicos o de comunicación que no son artís- ticos (publicidad), la lectura visual se identifica como un proceso multimodal, que se caracteriza por su modularidad, por la superación de los tradicionales marcos de lectura (de arriba abajo, izquierda-derecha) y por una actividad que complementa la arbitrariedad (típico de la lectura del registro) y la iconicidad (típico de lo visual) para obtener nuevos efectos de sentido.

Referencias

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Fecha de ultima modificación: 2014-04-21